Intervención Terapéutica Temprana en Gestantes con Alteración del Índice de Pulsatilidad de la Arteria Uterina. Hospital Dr. Rafael Calles Sierra. Falcón. Venezuela.

Autores:
María de Luz Goncalves Pereira.1 Wladimar Lourdes Hernández Ventura.2

Objetivo:

Evaluar la efectividad de la intervención terapéutica temprana en gestantes con alteración del Índice de Pulsatilidad (IP) de la arteria uterina, del Hospital Dr. Rafael Calles Sierra, Falcón, Venezuela. Metodología: Estudio analítico, cuasiexperimental, de campo, correlacional, de corte transversal, muestra 30 gestantes con alteración del IP de la arteria uterina, en el primer trimestre. Se indicó dosis bajas de Ácido acetilsalicílico, evaluando la efectividad del tratamiento a través de velocimetría Doppler. Resultados: 73,34% respondió satisfactoriamente a la terapéutica. No hubo síndrome hipertensivo en 66,67%, del porcentaje restante, 50% con IP>P95, desarrolló preeclampsia con signos de gravedad, 20% sin signos de gravedad y 20%, la variante HELLP. Conclusión: Existe correlación estadísticamente significativa, entre el uso de dosis bajas de Ácido acetilsalicílico y la disminución del IP de las arterias uterinas; a su vez, también existe relación estadísticamente significativa, entre el aumento del mismo, y la presencia de SHE (p<0,05).

Palabras clave: Ácido acetilsalicílico, Índice de Pulsatilidad, preeclampsia.

Early Therapeutic Intervention in Pregnant Women with Altered Uterine Artery Pulsatility Index. Dr. Rafael Calles Sierra Hospital. Falcón. Venezuela.

Abstract

Objective:

To evaluate the effectiveness of early therapeutic intervention in pregnant women with altered Pulsatility Index (PI) of the uterine artery, from Dr. Rafael Calles Sierra Hospital, Falcón, Venezuela. Methodology: Analytical, quasi-experimental, field, correlational, cross-sectional study, sample 30 pregnant women with altered PI of the uterine artery, in the first trimester. Low doses of acetylsalicylic acid were prescribed, evaluating the effectiveness of the treatment through Doppler velocimetry. Results: 73.34% responded satisfactorily to the therapy. There was no hypertensive syndrome in 66.67%, of the remaining percentage, 50% with PI> P95, developed preeclampsia with signs of severity, 20% without signs of severity and 20%, the HELLP variant. Conclusion: There is a statistically significant correlation between the use of low doses of aspirin and a decrease in uterine artery PI; in turn, there is also a statistically significant relationship between the increase in PI and the presence of HES (p<0.05).

Keywords: Acetylsalicylic acid, Pulsatility Index, preeclampsia.

Introducción

La mortalidad materna es un problema de salud pública inaceptablemente alto, principalmente en países en vía de desarrollo, situación identificada por la Organiza­ción Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), quienes se han preocupa­do por establecer programas que permitan reducir sus índices1.

Es importante mencionar que a causa de la preeclampsia cada 3 minutos muere una gestante en el mundo, estimándose un aproximado de 50.000 muertes anuales, es por tanto, la primera causa de ingreso a unidades de cuidados intensivos; en conjunto con la eclampsia representan la primera causa de morbimortalidad maternofetal a nivel mundial, y el 25% de los casos se dan en América Latina y el Caribe, esto según reportes de la OMS quien la considera como un programa de salud prioritario2.

La incidencia global de la preeclampsia (PE), oscila entre 2-10%, tiene impacto significativo como causa de muerte fetal intrauterina y de morbilidad neonatal, principalmente, debida a la necesidad de la finalización pretérmino de la gestación, y a su frecuente asociación con el crecimiento intrauterino restringido (CIR) siendo responsable de complicaciones maternas graves, como el desprendimiento prematuro de placenta normoinserta, coagulación intravascular diseminada, hemorragia cerebral, falla hepatorrenal, así como de un 15% de las muertes maternas, con una importante morbimortalidad neonatal3,4.

En Venezuela, su incidencia se ubica entre el 1,56% y el 6,3%, y 0,05% a 0,45% para la eclampsia. Según el último anuario de mortalidad, oficial y publicado por el Ministerio Popular Para la Salud (MPPS) en el año 2016, hubo un total de 986 fallecimientos, de los cuales 799 (81,03%) corresponden a muertes maternas (MM) y 187 a muertes maternas tardías (18,97%) resultando en una Razón de Muerte Materna (RMM) de 133,84 por cada 100 mil Nacidos Vivos Estimados (NVE). Las principales causas de MM corresponden, al grupo de afecciones obstétricas, 388 (39,35%), Trastornos Hipertensivos, 231 (23,43%) y complicaciones del trabajo de parto 123 (12,47%)5.

En la actualidad, se conoce, que dichos síndromes, afectan hasta al 10% de las gestantes, prevalencia que puede ser mayor, en países en vías de desarrollo. Éstos, se definen como el hallazgo de cifras tensionales elevadas, con tensión arterial sistólica (TAS) ≥140 mmHg y tensión arterial diastólica (TAD) ≥ 90mmHg, en dos tomas aisladas, posterior a 10 minutos de reposo, con la gestante en sedestación y el brazo a la altura del corazón; valoradas en ambas extremidades durante la primera consulta, se describe también, que dos tomas de TAS>160mmHg y TAD >110mmHg, con intervalo de 15 minutos, deben considerarse diagnósticas6,7.

Dicho lo anterior, se constituye como preeclampsia (PE), la hipertensión de nueva aparición, que acurre luego de las veinte (20) semanas de gestación, que se asocia a al menos uno de los siguientes criterios: proteinuria, disfunción orgánica materna clínica o analítica (clasificándose como PE con criterios de severidad) o disfunción uteroplacentaria. Se debe agregar, que la PE es una enfermedad multisistémica, caracterizada por la existencia de un daño endotelial, que precede al diagnóstico clínico, con una importante morbimortalidad materna y neonatal, principalmente, debida a la necesidad de la finalización pretérmino de la gestación, y a su frecuente asociación con el CIR7.

La PE, se considera de etiología desconocida, siendo catalogada como enfermedad del primer embarazo, y, entre las múltiples teorías propuestas, se estima que juega un papel importante la presencia del tejido trofoblástico y su inapropiada implantación, conllevando a vasos uterinos de alta resistencia y bajo flujo, lo cual podría ser valorado de manera directa, a través de la Flujometría Doppler de las arterias uterinas8.

En concordancia con lo anterior, el Doppler de vasos uterinos, fue descrito por Campbell, en 1983, como un medio para la predicción de PE. Los parámetros Doppler más utilizados para tal fin, son, el Índice de Resistencia (IR), el Índice de Pulsatilidad (IP), y la presencia de muesca protodiastólica (NOTCH). El IR, se define como la diferencia del pico sistólico con la velocidad telediastólica, sobre el pico sistólico; por su parte, el IP corresponde al pico sistólico menos la velocidad telediastólica sobre la velocidad media, y el NOTCH, es una incisura protodiastólica, evaluada de manera subjetiva9.

Desde entonces, múltiples estudios nacionales e internacionales, han evidenciado la capacidad del Doppler, como predictor de preeclampsia, encontrando mejor valor predictivo en los parámetros del NOTCH y del IP, con sensibilidad y especificidad variable, de acuerdo a la población seleccionada. Es importante demarcar, que el estudio Doppler de la arteria uterina, parece ofrecer buen rendimiento, cuando se realiza por vía transvaginal o transabdominal en el primer o segundo trimestre. Actualmente, se utiliza el IP promedio entre ambas arterias uterinas con el valor p95 como punto de corte de normalidad/anormalidad10.

En este sentido, se ha propuesto para valorar de forma indirecta la resistencia al flujo uteroplacentario, como una forma de detectar a las gestantes con riesgo mayor de desarrollar una PE. El método debe ser empleado entre las semanas 11 a 14 y 18 a 22 de gestación, donde alcanza una sensibilidad y especificidad de 40% a 50% y del 60% a 70%, respectivamente, para predecir los casos de PE temprana9.

Ahora bien, a partir de la identificación de la población de alto riesgo para preeclampsia, se han investigado diversas intervenciones preventivas, de las cuales, el uso del Ácido Acetilsalicílico (AAS) en bajas dosis es, hasta el momento, la única intervención farmacológica recomendada para la prevención de la preeclampsia; no obstante, se continúan estudiando otros agentes profilácticos potenciales, como las estatinas, los inhibidores selectivos de la ciclooxigenasa y la antitrombina. Todo ello, da cuenta de los enormes esfuerzos por parte de la comunidad científica, para reducir la aparición de este síndrome y sus complicaciones10.

En este sentido, la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) recomienda en población con factores de riesgo para PE, la administración de AAS a bajas dosis (100 mg/día, por la noche a partir de las 12 semanas de embarazo y hasta el final de la gestación) dado que podría comportar una reducción del 14% en la incidencia de la patología y del 21% en la tasa de mortalidad perinatal. El tratamiento debe ser iniciado a las 12-14 semanas de gestación, sugiriendo 75 mg/día de AAS el cual deberá suspenderse de 5 a 10 días antes de la fecha probable de parto para disminuir el riesgo de sangrado durante el parto12.

Tanto la incidencia de PE, como la morbimortalidad materno perinatal asociada a ésta, en el Hospital Dr. Rafael Calles Sierra, ubicado en la ciudad de Punto Fijo, del estado Falcón, en Venezuela, es alta; siendo una de las principales causas de ingreso a la Unidad de Cuidados Intensivos de la institución. La cura de la enfermedad es el parto y el objetivo final de la identificación anticipada de un grupo de mujeres de alto riesgo, es la reducción de la morbimortalidad asociadas. Esto conduce a la necesidad de pruebas de despistaje que puedan seleccionar un verdadero grupo de alto riesgo, permitiendo así, instaurar ensayos terapéuticos en la gestación temprana.

De acuerdo con lo antes planteado, surge la siguiente interrogante: ¿Qué efectividad tiene la intervención terapéutica temprana en gestantes con alteración del IP de la arteria uterina, que acuden al Hospital Dr. Rafael Calles Sierra?

De modo que, el presente trabajo de investigación está orientado a demostrar la eficacia del uso profiláctico de AAS en dosis bajas (81mg) para disminuir la incidencia de PE de aparición precoz, en aquellas gestantes consideradas potencialmente de alto riesgo, para desarrollar esta patología. Se busca dar un enfoque clínico integral, que sea práctico y sencillo, para poder identificar de forma sistemática todos los factores de riesgo para PE de aparición precoz e inmediatamente iniciar el tratamiento profiláctico. Geográficamente, esta investigación estuvo delimitada en la cuidad de Punto Fijo, municipio Carirubana, estado Falcón, Venezuela. A su vez, como institución, tuvo lugar en el servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Dr. Rafael Calles Sierra, y, temporalmente, al lapso comprendido entre enero- diciembre de 2023.

Entre los antecedentes que fundamentan esta investigación, y que han sido publicados a nivel internacional y nacional, se tienen los siguientes:

García, M. (2019), en Riobamba, Ecuador, estudio titulado “Intervención terapéutica oportuna en gestantes, para disminuir la aparición de preeclampsia- eclampsia”. Fue una investigación cuasi experimental, con diseño longitudinal, descriptivo, correlacional. Evidenció que existía un bajo nivel de prescripción precoz de fármacos protectores. Concluyó en que la administración antes de las 16 semanas de gestación, de AAS, ejerce una acción protectora en relación a la aparición de estos trastornos (p<0,03), recomendando el uso oportuno de éste, en embarazadas con factores de riesgo13.

Por su parte, Martínez, L., e Ybaseda, J. (2020), en Lima, Perú, llevaron a cabo una investigación titulada “Índice de pulsatilidad de la arteria uterina entre las 11 y 14 semanas de gestación, como predictor de preeclampsia”, siendo un trabajo descriptivo, de búsqueda bibliográfica. Encontraron que, la media del IP, fue de 1,92 a 2,41, con punto de corte de IP> 1,71 (p<0,05). Concluyeron con que la asociación de preeclampsia con el IP de la arteria uterina, en primer trimestre, es un buen método de cribado, con sensibilidad y especificidad variable, pero suficiente14.

Por otro lado, De Gracia, P. (2022), en Lima, Perú, efectuó un estudio analítico, de búsqueda bibliográfica, denominado “Evidencias del Ácido Acetilsalicílico en la prevención de la preeclampsia”. Como resultado obtuvo que para la predicción de dicha patología se requiere de hallazgos clínicos, biomarcadores y Doppler de la arteria uterina; con efectividad variable del AAS, en su prevención. Consideró 50 y 150 mg como dosis más efectivas, siendo, 81mg/día, la más recomendada en la actualidad15.

Espeche, M. y Salazar R, en Argentina (2022), realizó estudio cohorte retrospectivo con la finalidad de analizar la utilidad de la dosis de 100 mg de aspirina como medida de prevención para preeclampsia en pacientes embarazadas de alto riesgo. Fueron evaluadas 633 embarazadas, de las cuales 281 mujeres (44,3%) recibieron aspirina. La prevalencia total de PE en nuestra muestra fue de 151 embarazadas (23,8%). Concluyen que la utilización de Aspirina 100 mg por día antes de las 20 semanas de gestación en embarazadas de alto riesgo disminuyó el riesgo de desarrollar PE, independientemente de la edad y factores de riesgo16.

En relación a los estudios nacionales se encuentra el realizado por Utrera M, y col en Barcelona, Anzoátegui Venezuela (2022), con el objetivo de determinar la capacidad predictiva de desarrollo de trastornos hipertensivos del embarazo mediante la medición del índice de pulsatilidad de las arterias uterinas y la tensión arterial media. En 66 pacientes se determinó el índice de pulsatilidad de las arterias uterinas, la tensión arterial media y el índice de masa corporal entre 18 y 22 semanas más 6 días de gestación. Encontró una correlación positiva entre alteración de las arterias uterinas y los trastornos hipertensivos del embarazo. El IP de la arteria uterina fue mayor en el grupo que desarrolló trastorno hipertensivo del embarazo, con sensibilidad de 11 %17.

En lo que respecta a las investigaciones realizadas a nivel regional, no se cuenta con estudios que relacionen la implementación de ácido acetilsalícico en la profilaxis de preeclampsia, tras medición del IP de la arteria uterina.

En otro orden de ideas, al revisar las bases teóricas relacionadas con esta investigación, se menciona a la arteria uterina como el vaso más estudiado en la evaluación Doppler en Preeclampsia, puesto que representa la condición vascular materna, a través del índice de pulsatilidad, índice de resistencia y la presencia de muesca diastólica temprana, el punto de corte es el percentil 95 establecido para la edad gestacional, valores superiores guardan relación además con la presencia de CIR, desprendimiento placentario, muerte fetal intraútero y se asocian a mala invasión trofoblástica en el miometrio del lecho placentario y cambios fisiológicos anormales de las arterias espirales18.

En concordancia con lo anterior, si se confirma la alteración de la impedancia en las arterias uterinas en el primer trimestre, se puede establecer un manejo preventivo que sea óptimo. En la actualidad, el Doppler de las arterias uterinas, es el examen no invasivo más utilizado como método predictor de PE cuando se evalúa entre las semanas 11-14 de gestación9.

Considerando la alta utilidad de este método, es pertinente describir la técnica para su realización; que puede ser efectuado tanto por vía transabdominal como transvaginal; ambos han demostrado tener reproducibilidad a la hora de medir el IP de la arteria uterina, sin embargo, la que posee mayor sensibilidad y especificidad en la edad gestacional planteada, es aquella que se realiza por vía transvaginal. Se debe obtener un corte sagital del útero, con la ayuda del Doppler color, se identifica el trayecto de la arteria uterina, y se toman las mediciones: Índice de Resistencia (IR) e Índice de Pulsatilidad (IP), antes de su ramificación en arterias arcuatas. Este proceso, se debe hacer de manera estandarizada, para garantizar la precisión de los resultados, por personal capacitado19,9.

Se describe que, vía transvaginal, el transductor debe ser colocado paramedialmente al cérvix, a nivel del orificio cervical interno, sabiendo que, desplazamientos hacia abajo pueden identificar erróneamente, una rama cervical o hacia arriba, una arteria arcuata. Por su parte, vía abdominal se coloca el transductor longitudinalmente en la fosa ilíaca, de forma paralela a la cresta ilíaca y pared uterina, identificando los vasos ilíacos. Con un movimiento sutil en sentido medial se identifica la arteria uterina en una falsa imagen de cruce con la arteria ilíaca externa. La arteria uterina debe estudiarse 1-2 cm distal a este punto9.

Conviene tomar en cuenta ciertos aspectos técnicos para la medición: se debe identificar el vaso con Doppler color y utilizar escalas de velocidad altas (>60cm/s) para la identificación selectiva del vaso, el zoom tiene que ser suficiente para que el área de interés ocupe >50% de la pantalla, el ángulo de insonación para las mediciones debe ser inferior a 30°. De igual modo, deben obtenerse tres o más ondas de velocidad de flujo (OVF) de similares características para la medición, con una escala adecuada de Doppler pulsado (PRF), ocupando al menos tres cuartas partes del eje de las “y”, con la línea de base en el cuarto inferior del eje, el tamaño de la muestra del Doppler debe ser equivalente al diámetro de la arteria y debe colocarse en el centro del vaso. Por último, la velocidad de barrido debe permitir mostrar en pantalla 5-10 ondas19.

Cabe resaltar, que, el flujo uterino anormal, a nivel de la arteria uterina, se puede analizar cuantitativa (Índice de Pulsatilidad) o cualitativamente (NOTCH). Dado que la valoración de este último, no ha demostrado mejorar el rendimiento clínico de los índices cuantitativos, se sugiere emplear sólo el IP medio: IP derecha + IP izquierda / 2; y se valorar según curvas de normalidad para la edad gestacional. El IP se considerará anormal cuando el IP>percentil 95 para la edad gestacional. Se obtiene al dividir la diferencia de la velocidad pico sistólica y la velocidad del flujo al final de la diástole, entre la velocidad promedio9,19.

En otro orden de ideas, concierne agregar que, el efecto por el cual se utilizan las bajas dosis de AAS es debido a la disminución de la síntesis plaquetaria de tromboxano A2 (TXA2), el cual es un vasoconstrictor fisiológico, además de mantener la secreción de prostaciclina en los vasos sanguíneos, con efecto vasodilatador. Ambos efectos, dan como resultado la disminución en la resistencia vascular periférica. Este mecanismo descrito, se logra con dosis bajas, mientras que las dosis altas no generan el mismo resultado, por ende, la estrategia de prevención se fundamenta a base de dosis bajas20.

Es importante mencionar que la dosis más estudiada es 60 a 100 mg por día y por ahora, la dosis de 75 a 81 mg, es la estrategia medicamentosa que mejor evidencia tiene para prevenir la preeclampsia siendo recomendada por la mayoría de las Sociedades de Ginecología y Obstetricia, se debe iniciar a las 12 semanas de gestación, preferiblemente antes de la semana 16, se debe mantener hasta las 36 a 37 semanas, o antes de aparecer la preeclampsia o si es necesaria la interrupción del embarazo por alguna causa específica. A dosis baja ha demostrado ser segura y no se han mostrado efectos adversos. La OMS no recomienda dosis mayores a 150 mg por el riego de hemorragia obstétrica21.

A pesar de que existen estudios donde se ha utilizado la profilaxis hasta el parto, sin asociarse a efectos secundarios maternofetales durante la labor de parto, algunos expertos recomiendan preferiblemente suspenderlo a las 36 semanas de gestación o una semana anterior al parto, para evitar cualquier complicación. Esto demuestra que la interrupción, no tiene un consenso definitivo del momento exacto de suspenderla22.

Se plantea para la presente investigación, como objetivo, Evaluar la efectividad de la intervención terapéutica temprana en gestantes con alteración del IP de la arteria uterina, que acuden al Hospital Dr. Rafael Calles Sierra, Punto Fijo, , estado Falcón, Venezuela, en el período enero- diciembre de 2023. Como objetivos específicos se busca: Medir el Índice de Pulsatilidad de la arteria uterina entre las 11-14 y 20-24 semanas, y a las 28 semanas, en la población en estudio; Intervenir de forma terapéutica con Ácido Acetilsalicílico, en las gestantes con alteración del IP; y evaluar respuesta terapéutica, posterior a la administración de Ácido Acetilsalicílico.

Materiales y Métodos

Se realizó un estudio analítico, correlacional intragrupo, diseño de campo, cuasi experimental, de corte transversal. La población estuvo conformada por todas aquellas gestantes con alteración del Índice de Pulsatilidad de la arteria uterina, determinado a través de la ecografía Doppler, entre las 11 y 14 semanas de gestación que acudieron al Servicio de Alto Riesgo Obstétrico del Hospital “Dr. Rafael Calles Sierra”, entre enero y diciembre del año 2023. A través de muestreo no probabilístico e intencional se seleccionaron todas aquellas pacientes con IP de la arteria uterina alterado, que accedieron de forma voluntaria a la participación en el estudio, y a la administración de la terapéutica de AAS 81 mg al día hasta la semana 36 de gestación.

Fueron seleccionadas 30 gestantes que cumplieron con los siguientes criterios de inclusión: Gestantes de cualquier edad, con gestación única entre las 11 y 14 semanas, con Índice de Pulsatilidad de la arteria uterina alterado (>P95) que aceptaron su participación voluntaria a través de la firma del consentimiento informado, manifestando compromiso al cumplimiento del medicamento. Fueron excluidas gestantes con comorbilidades como hipertensión arterial crónica, insuficiencia renal, cardiopatías, coagulopatías, vasculopatías, gestantes con malformaciones fetales confirmadas, malformaciones uterinas congénitas. trastornos hemorrágicos, como la enfermedad de Von Willebrand, úlcera péptica, mujeres con uso regular de AAS, hipersensibilidad al AAS y otros antiinflamatorios no esteroideos (AINES).

A las gestantes que cumplieron con los criterios de inclusión les fue explicado el propósito de la investigación, con la finalidad de obtener las firmas del consentimiento informado, explicándoles la importancia y beneficio de su participación y de ajustarse al tratamiento, con dosis bajas de AAS (81mg/día). Consecutivamente, se les solicitó información para completar el instrumento de recolección de datos, el cual fue diseñado tomando en cuenta los objetivos planteados en la investigación y sometido al juicio de expertos, los cuales evaluaron cada una de las categorías que permitieron medir las variables en estudio. Este grupo de expertos estuvo conformado por tres especialistas, dos de ellos del área de Ginecología y Obstetricia; y el tercero, del área de Perinatología.

Dicho instrumento, está constituido por tres partes: 1. Datos de identificación. 2. Edad gestacional e Índice de Pulsatilidad de la arteria uterina. 3. Concerniente a la evolución y finalización de la gestación, en relación al uso de AAS. Los datos se procesaron se forma manual, la codificación se realizó en aquellos casos donde se asociaron dos o más variables y se realizó análisis descriptivo, e inferencial.

En relación a la recolección de los datos, se realizó en 2 fases, inicialmente la entrevista, se explicó a cada gestante, sobre la confidencialidad de los datos y el uso de los mismos, únicamente para el estudio, los cuales fueron tomados a través de la entrevista personalizada, recabados mediante el instrumento antes descrito. Posteriormente, a través de la observación científica se procedió a la medición del Índice de Pulsatilidad, de las arterias uterinas, entre las 11-14 semanas de gestación, con el uso de la ecografía Doppler; todas aquellas gestantes con alteración de la prueba se le indicó la terapéutica descrita; con evaluación cada 15 días en consulta de Alto Riesgo Obstétrico.

Posteriormente, se realizó una segunda medición del IP, entre las 20-24 semanas, con la finalidad de determinar la existencia de modificaciones del mismo, con reevaluación ecográfica en la semana 28, con igual finalidad; y, se continuó con la vigilancia del embarazo en consulta Alto Riesgo Obstétrico, observando signos vitales y evolución materno fetal hasta la resolución del mismo, estableciendo el grado de relación entre las variables en estudio, y la eficacia de la intervención terapéutica precoz. Es importante mencionar que todos los estudios Doppler fueron realizados por un especialista en Perinatología.

Los resultados obtenidos, se agruparon en función de los objetivos específicos, a fin de ser expresados por distribución de frecuencia y porcentaje. La relación entre las variables de estudio, se determinó utilizando la prueba no paramétrica de Chi 2, considerándose como valor significativo de asociación, un p<0.05.

Resultados

Tabla 1. Índice de Pulsatilidad de la arteria uterina en la población en estudio.

Índice de

Pulsatilidad

Arteria Uterina

Edad Gestacional

11-14 semanas

20-24 semanas

28 semanas

N (30)

%

N (30)

%

N (30)

%

<P95

-

-

19

63,4

22

73,3

>P95

30

100

11

36,6

08

26,6

TOTAL

30

100

30

100

30

100

Media:

2,54

1,19

0,87

IP máximo:

2,78

1,50

1,25

IP mínimo:

2,26

0,81

0.66

En la tabla anterior, se aprecia que el IP de la arteria uterina, tuvo una media de 2,54 entre las 11 y 14 semanas; observando importante mejoría de éste, en evaluaciones posteriores, logrando medias de 1,19 y 0,87 para las semanas 20 a 24 y 28, respectivamente. Se evidencia, además, que entre las 20-24 semanas, el 63,4% presentó IP normal (<P95), tras la administración de ácido acetilsalicílico, y, solo 36,6% mantuvo alteración del mismo. Por su parte, se observa que, a las 28 semanas, el 73,3% de la población en estudio, alcanzó un IP de la arteria uterina <P95, demostrando la efectividad de la terapéutica instaurada.

Tabla 2. Intervención terapéutica de forma temprana, con Ácido Acetilsalicílico, en las gestantes con alteración del IP de la arteria uterina.

RESPUESTA TERAPÉUTICA

Índice de Pulsatilidad

Arteria uterina

SIN HIE post tratamiento

CON HIE post tratamiento

Total

%

N

%

N

%

<P95

20

66,67

02

6, 67

22

73,34

>P95

0

 

08

26,66

8

26,66

Total

20

66,67

10

33,33

30

100,00

HIPERTENSIÓN INDUCIDA EN EL EMBARAZO

Índice de Pulsatilidad

Arteria uterina

Preeclampsia

Preeclampsia con signos de gravedad

Variante HELLP

N

%

N

%

N

%

<P95

02

20

0

0

0

0

>P95

01

10

05

50

02

20

Total

03

30

5

50

2

20

Respecto a la evolución de la gestación, en relación a la administración de dosis bajas de ácido acetilsalicílico, tal como se observa en la Tabla 2, se obtuvo que, el 73,34% de la población en estudio, logró mejorar significativamente el valor de IP para la edad gestacional, sin evidencia de desarrollo de síndromes hipertensivos en el 66,67%. Sin embargo, el 6,67%, de este grupo con IP<P95 , cursó con hipertensión inducida en el embarazo. Por su parte, el 26,66%, no mostró mejoría en comparación a mediciones previas; desarrollando a su vez, patología hipertensiva, para un total del 33,33% de las gestantes con esta complicación. El 20% de las gestantes con IP <P95 cursó con preeclampsia sin signos de gravedad. Por el contrario, en presencia de IP>P95, el 50% presentó preeclampsia con signos de gravedad, y, el 20%, la variante HELLP.

Al establecer la asociación entre las variables en estudio, se obtuvo que existe una correlación estadísticamente significativa, entre el uso de dosis bajas de Ácido acetilsalicílico y la disminución del IP de las arterias uterinas; y, que a su vez, existe una relación estadísticamente significativa, entre el aumento del IP de la arteria uterina, y la presencia de SHE.

Discusión

En relación a la medición del IP de la arteria uterina, entre las 11 y 14 semanas de gestación, se obtuvo una media de 2,54, con valor mínimo de 2,26 y máximo de 2,78; apreciándose que el 26,6% de la población estudiada, mantuvo IP de la arteria uterina >P95, tras la intervención terapéutica; resultados opuestos a los obtenidos por Martínez, L., e Ybaseda, J. (2020), donde el promedio general del IP de la arteria uterina fue de 1,92 a 2,41. Sin embargo, ambos estudios demuestran una importante relación entre la alteración del IP de la arteria uterina y el desarrollo de algún síndrome hipertensivo del embarazo, recomendando el uso oportuno de éste método, como predictor, en gestantes de riesgo.

Por otro lado, respecto a la evaluación de la respuesta terapéutica, con el uso de AAS; se determinó que la mayoría de las gestantes, reaccionó satisfactoriamente, observando que el 73,34% de ellas, alcanzó disminuir el valor del IP de la arteria uterina y, que el 66,67% no desarrolló patología hipertensiva; hallazgos similares a los encontrados por Espeche, M. y Salazar R. (2022), quienes establecieron que las pacientes que recibieron aspirina, presentaron menos eventos hipertensivos, administrándola de forma precoz, es decir, antes de las 20 semanas; aunque, éstos autores difieren en la dosis empleada, pues, aseguran que 100mg/día disminuyen el riesgo de parecer hipertensión inducida en el embarazo.

Por el contrario, los resultados antes mencionados, coinciden con lo encontrado por De Gracia, P. (2022), quien comprobó la efectividad de la aspirina en la prevención de la PE, considerando dosis entre 50-150mg como las más eficaces, pero, recomendando el uso de 81mg/día para tal fin. Finalmente, al establecer la asociación entre las variables en estudio, se estableció que existe una correlación estadísticamente significativa, entre el uso oportuno de AAS y la disminución del IP de la arteria uterina, y por ende, en la prevención de la aparición de síndromes hipertensivos del embarazo (p<0,05); concordando con los hallazgos de García, M. (2019), quien sugirió que administrar AAS, antes de las 16 semanas de gestación, previene el desarrollo de dichas complicaciones y recomendó el uso oportuno de éste. A su vez, encaja con lo publicado por Utrera, M. y col. (2022), donde describen la correlación positiva entre alteración de las arterias uterinas y la presencia de los síndromes hipertensivos del embarazo, que al igual que en esta investigación, el IP de las uterinas fue mayor en el grupo que desarrolló la patología hipertensiva.

Conclusiones

Se evaluaron 30 pacientes con alteración del IP de la arteria uterina, durante la evaluación de la respuesta terapéutica a bajas dosis de AAS (81mg al día), se determinó que el 73,34% de las gestantes, logró normalizar los niveles del IP de la arteria uterina, sin aparición de los síndromes hipertensivos en el 6,67% de ellas; por el contrario, el 26,66% no mostró mejoría tras recibir la terapéutica, y se totaliza el 33,33% con progresión a hipertensión inducida en el embarazo, incluyendo aquellas con IP de la arteria uterina <P95. En relación a esto último, hubo un 20% de gestantes con PE sin signos de gravedad; en contraste con el 50%, de pacientes con IP de la arteria uterina >P95, que desarrollaron PE con signos de gravedad. De igual modo, se encontró que el 20% de este grupo, avanzó a la variante HELLP.

Con un coeficiente de 0,000, al asociar las variables estudiadas, se estableció la existencia de correlación estadísticamente significativa, entre la administración temprana de bajas dosis de AAS y el descenso y normalidad del IP de la arteria uterina; además, se comprobó la correspondencia estadísticamente significativa, entre el aumento de dicho parámetro, y la aparición de síndromes hipertensivos en el embarazo.

Referencias Bibliográficas

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(1) Médico Cirujano, Universidad Nacional Experimental Francisco de Miranda (UNEFM) Médico Especialista en Ginecología y Obstetricia. Universidad Central de Venezuela (UCV). Adjunto II Servicio Ginecología y Obstetricia del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales. Hospital Dr. Rafael Calles Sierra. Falcón Venezuela. Docente de Pre y Post Grado UNEFM. +58 4146970318. Orcid:0009-0000-2366-6081.

(2) Médico Cirujano, Universidad Nacional Experimental Francisco de Miranda (UNEFM) Médico Especialista en Ginecología y Obstetricia. UNEFM. Adjunto I Servicio Ginecología y Obstetricia Materno Infantil Ezequiel Zamora Falcón, Venezuela. +58 4126493497. Orcid:0009-0004-6976-0021

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